Por Julieta Pelcastre
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el Cártel de Sinaloa, Los Zetas y otras organizaciones delictivas transnacionales de América Latina trafican grandes cantidades de drogas a los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y a otros países del Medio Oriente, según el Teniente General Dhahi Khalfan Tamin, subjefe de la Fuerza Policiaca de Dubai.
Los grupos de narcotráfico de América Latina también están lavando millones de dólares de sus ganancias en los países del Medio Oriente, dijo Nestor Rosanía, director del Centro de Estudios en Seguridad, Defensa y Asuntos Internacionales (CESDAI) de Colombia.
Los traficantes de drogas de México, Colombia y otros países están buscando nuevos mercados para las drogas, comentó Raúl Benítez, analista de seguridad de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Los cárteles de drogas buscan nuevos mercados
Para maximizar sus ganancias, los traficantes de drogas mexicanos y sudamericanos siempre están en busca de nuevos mercados, señaló Benítez.
“Las organizaciones delictivas colombianas están buscando mercados y rutas seguras porque los cárteles mexicanos ya no son confiables como intermediarios, desde que el gobierno mexicano los ha enfrentado ocasionándoles fuertes golpes”, afirmó el analista de seguridad.
Los narcotraficantes de Latinoamérica han forjado alianzas con grupos del crimen organizado del Medio Oriente, añadió Benítez.
Las FARC, el Cártel de Sinaloa, Los Zetas y otras organizaciones delictivas transnacionales están utilizando a los EAU como centro estratégico para el tráfico de drogas y el lavado de dinero, comentó Johan Obdola, presidente de la Organización Internacional para la Seguridad e Inteligencia, a Khaleej Times. Obdola asesora a los gobiernos del Medio Oriente sobre cómo combatir al narcotráfico.
Las organizaciones delictivas transnacionales sudamericanas y mexicanas han incrementado sus operaciones en el Medio Oriente con el paso del tiempo, dijo Obdola. En los últimos 10 años, los cárteles de drogas han incrementado sus operaciones en África Occidental. Desde esa región, los traficantes de drogas han estado transportando grandes cantidades de drogas al Medio Oriente, comentó Obdola.
La política de cero impuestos de los países miembros del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) hace atractivos a esos países para los narcotraficantes que están buscando lugares para lavar las ganancias de sus negocios de drogas. El CCG está compuesto por los EAU, Arabia Saudita, Bahrein, Kuwait, Qatar y Omán.
Los grupos del crimen organizado localizados en Brasil, Uruguay, El Salvador, Venezuela y Trinidad y Tobago también están buscando nuevas rutas para el tráfico de drogas en la región del CCG, dijeron las autoridades.
Grandes decomisos de drogas
Las autoridades del Medio Oriente han realizado una serie de importantes decomisos de drogas en los últimos meses.
Por ejemplo, los servicios de seguridad de Líbano decomisaron 13 kilos de cocaína en un avión comercial que salió de Brasil. El avión hizo escala en Qatar antes de aterrizar en Líbano.
Las fuerzas de seguridad de Arabia Saudita confiscaron un paquete enviado desde América del Sur que contenía 152 gramos de cocaína, de acuerdo conl reporte de 2013 de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE).
Las fuerzas de seguridad de los EAU confiscaron 11 toneladas de drogas en 2013, según los oficiales de la Agencia Federal Antinarcóticos de los Emiratos Árabes Unidos.
En 2013, las fuerzas de seguridad de Irán, Pakistán, Omán y los EAU han realizado cada uno por su parte decomisos de drogas de más de 10 toneladas, en grandes embarcaciones, según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD).
Los narcotraficantes de Latinoamérica “no sólo violan las leyes de estupefacientes, sino también las leyes que rigen a las instituciones financieras”, comentó el Teniente General Tamin, subjefe de la Fuerza Policiaca de Dubai, al sitio web Flarenetwork.org.
Cerca del 75% de las drogas incautadas en el Medio Oriente fueron enviadas desde Brasil, de acuerdo con los reportes publicados.
Grandes ganancias
Los grupos del crimen organizado pueden generar grandes ganancias traficando drogas al Medio Oriente. Un kilo de cocaína puede venderse por hasta $90,000 (USD) en el Medio Oriente. En comparación, la misma cantidad de cocaína podría venderse en $30,000 (USD) en los Estados Unidos, reportó La Nación.
El incremento del narcotráfico en el Medio Oriente ha llevado a un mayor número de arrestos por esta actividad, dijeron las autoridades.
Por ejemplo, casi el 90% de los presos en los EAU fueron arrestados por delitos relacionados con las drogas, de acuerdo con un estudio reciente de la Organización de Detenidos del Reino Unido realizado en Dubai.
“Los cárteles de drogas en América Latina están descentralizando sus actividades cada vez más. La atomización de las pandillas de narcotraficantes se ha hecho más dinámica. Existen minicárteles que operan de forma independiente”, dijo Rosanía, el analista de seguridad del CESDAI.
Los niveles más altos del narcotráfico en Medio Oriente podrían conducir a la violencia del crimen organizado, según Rosanía.
“El Medio Oriente se ha convertido en una ruta estratégica para los grupos delictivos transnacionales para trasladar las drogas; el que tenga el control de los puntos de distribución, ubicación y compra y venta de drogas, es el que va a tener el poder y el que va a generar violencia”, comentó Rosanía.
Iniciativa de seguridad
En 2013, las autoridades inauguraron el Centro de Información del Delito en Doha, Qatar, para coordinar la lucha contra el narcotráfico en la región del CCG. El centro fue abierto para maximizar la cooperación entre las fuerzas de seguridad de diferentes países, dijeron los funcionarios. Las fuerzas de seguridad comparten información sobre investigaciones y las actividades de los traficantes de drogas, dijeron las autoridades.
El centro ha firmado un acuerdo de cooperación con la Organización Internacional de Policía Criminal (INTERPOL), la Oficina de Enlace de Inteligencia Regional para el Medio Oriente de la Organización Mundial de Aduanas y el Instituto de Formación de la Policía del Ministerio del Interior de Qatar.
Los países del Medio Oriente han estado trabajando con agencias de todo el mundo para combatir las amenazas del narcotráfico. La cooperación internacional es importante en la lucha contra las organizaciones criminales transnacionales, agregó Rosanía.
Las autoridades del Medio Oriente necesitan “entender la forma en que cambian y se adaptan los cárteles de Latinoamérica, cómo enfrentarse a las estructuras criminales dentro de sus capacidades y cómo entrenar a sus fuerzas de seguridad para combatir el narcotráfico”, señaló Rosanía.
“Hay países que han enfrentado conflictos raciales, étnicos o religiosos, pero no a los cárteles de drogas”, concluyó Rosanía.
Colombiana vinculada al narco y a las Farc es detenida en Guatemala...
La Policía Nacional Civil (PNC), en coordinación con la Policía Internacional (Interpol), capturó ayer en el redondel de El Obelisco, zona 9, a la colombiana Sonia Cruz Quinceño, de 47 años, alías la Mona o Adriana Ríos, señalada de trasiego de drogas hacia Estados Unidos.
Colombiana sonia Cruz Quinceño fue capturada en el redondel de El Obelisco, zona 9. Hoy podría ser extraditada a EE. UU.1 de 1
CIUDAD DE GUATEMALA - La extranjera se conducía en un vehículo por ese sector, acompañada de su esposo, también colombiano, cuando se los detuvo tras persecución.
Investigadores afirmaron que semanas atrás comenzó la vigilancia, ya que tenían información de que la sindicada tenía ocho días de haber ingresado en el país.
De acuerdo con las pesquisas, su aprehensión se dio mediante el trabajo de inteligencia entre ambas instituciones policiales.
EE. UU. la requiere
La Corte Distrital de Virginia, EE. UU., pidió que Cruz fuera extraditada hacia ese país por estar vinculada con el trasiego de drogas.
La orden de captura es por conspiración para la manufactura y distribución de cinco kilos o más de cocaína y conspiración para el tráfico de armas para cometer un crimen, así como tráfico ilegal de armas.
Se le vincula con bandas criminales en su país, como los Urabeños y el Frente 36 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
También con los carteles del narcotráfico mexicano los Zetas, los Caballeros Templarios y de Sinaloa.
Cruz ya enfrentó a la justicia estadounidense, y que fue condenada a tres años de prisión por lavado de dinero, al estar vinculada con una casa de cambio utilizada como fachada para actividades ilícitas.
Sin grilletes
La PNC no engrilletó a la colombiana, e incluso se mantuvo a distancia considerable de ella, mientras la detenida conversaba nerviosa con quien dijo era su esposo.
Momentos después, al lugar de la detención llegó un funcionario estadounidense, y fue él quien empezó los trámites para que hoy sea trasladada a Virginia y enfrente a la justicia de ese país.
En Guatemala no fue presentada ante juez, ya que no tiene una orden de captura, sino que la requiere otra nación, por lo que no se debe efectuar proceso judicial que ordene su extradición al país del norte.
La colombiana fue trasladada a la Embajada de EE. UU. para el proceso de documentación, y minutos después salieron dos camionetas que enfilaron rumbo a la diagonal 6, zona 10, una con dirección al Aeropuerto Internacional La Aurora, y de la otra no se logró establecer su destino.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el Cártel de Sinaloa, Los Zetas y otras organizaciones delictivas transnacionales de América Latina trafican grandes cantidades de drogas a los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y a otros países del Medio Oriente, según el Teniente General Dhahi Khalfan Tamin, subjefe de la Fuerza Policiaca de Dubai.
Los grupos de narcotráfico de América Latina también están lavando millones de dólares de sus ganancias en los países del Medio Oriente, dijo Nestor Rosanía, director del Centro de Estudios en Seguridad, Defensa y Asuntos Internacionales (CESDAI) de Colombia.
Los traficantes de drogas de México, Colombia y otros países están buscando nuevos mercados para las drogas, comentó Raúl Benítez, analista de seguridad de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Los cárteles de drogas buscan nuevos mercados
Para maximizar sus ganancias, los traficantes de drogas mexicanos y sudamericanos siempre están en busca de nuevos mercados, señaló Benítez.
“Las organizaciones delictivas colombianas están buscando mercados y rutas seguras porque los cárteles mexicanos ya no son confiables como intermediarios, desde que el gobierno mexicano los ha enfrentado ocasionándoles fuertes golpes”, afirmó el analista de seguridad.
Los narcotraficantes de Latinoamérica han forjado alianzas con grupos del crimen organizado del Medio Oriente, añadió Benítez.
Las FARC, el Cártel de Sinaloa, Los Zetas y otras organizaciones delictivas transnacionales están utilizando a los EAU como centro estratégico para el tráfico de drogas y el lavado de dinero, comentó Johan Obdola, presidente de la Organización Internacional para la Seguridad e Inteligencia, a Khaleej Times. Obdola asesora a los gobiernos del Medio Oriente sobre cómo combatir al narcotráfico.
Las organizaciones delictivas transnacionales sudamericanas y mexicanas han incrementado sus operaciones en el Medio Oriente con el paso del tiempo, dijo Obdola. En los últimos 10 años, los cárteles de drogas han incrementado sus operaciones en África Occidental. Desde esa región, los traficantes de drogas han estado transportando grandes cantidades de drogas al Medio Oriente, comentó Obdola.
La política de cero impuestos de los países miembros del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) hace atractivos a esos países para los narcotraficantes que están buscando lugares para lavar las ganancias de sus negocios de drogas. El CCG está compuesto por los EAU, Arabia Saudita, Bahrein, Kuwait, Qatar y Omán.
Los grupos del crimen organizado localizados en Brasil, Uruguay, El Salvador, Venezuela y Trinidad y Tobago también están buscando nuevas rutas para el tráfico de drogas en la región del CCG, dijeron las autoridades.
Grandes decomisos de drogas
Las autoridades del Medio Oriente han realizado una serie de importantes decomisos de drogas en los últimos meses.
Por ejemplo, los servicios de seguridad de Líbano decomisaron 13 kilos de cocaína en un avión comercial que salió de Brasil. El avión hizo escala en Qatar antes de aterrizar en Líbano.
Las fuerzas de seguridad de Arabia Saudita confiscaron un paquete enviado desde América del Sur que contenía 152 gramos de cocaína, de acuerdo conl reporte de 2013 de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE).
Las fuerzas de seguridad de los EAU confiscaron 11 toneladas de drogas en 2013, según los oficiales de la Agencia Federal Antinarcóticos de los Emiratos Árabes Unidos.
En 2013, las fuerzas de seguridad de Irán, Pakistán, Omán y los EAU han realizado cada uno por su parte decomisos de drogas de más de 10 toneladas, en grandes embarcaciones, según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD).
Los narcotraficantes de Latinoamérica “no sólo violan las leyes de estupefacientes, sino también las leyes que rigen a las instituciones financieras”, comentó el Teniente General Tamin, subjefe de la Fuerza Policiaca de Dubai, al sitio web Flarenetwork.org.
Cerca del 75% de las drogas incautadas en el Medio Oriente fueron enviadas desde Brasil, de acuerdo con los reportes publicados.
Grandes ganancias
Los grupos del crimen organizado pueden generar grandes ganancias traficando drogas al Medio Oriente. Un kilo de cocaína puede venderse por hasta $90,000 (USD) en el Medio Oriente. En comparación, la misma cantidad de cocaína podría venderse en $30,000 (USD) en los Estados Unidos, reportó La Nación.
El incremento del narcotráfico en el Medio Oriente ha llevado a un mayor número de arrestos por esta actividad, dijeron las autoridades.
Por ejemplo, casi el 90% de los presos en los EAU fueron arrestados por delitos relacionados con las drogas, de acuerdo con un estudio reciente de la Organización de Detenidos del Reino Unido realizado en Dubai.
“Los cárteles de drogas en América Latina están descentralizando sus actividades cada vez más. La atomización de las pandillas de narcotraficantes se ha hecho más dinámica. Existen minicárteles que operan de forma independiente”, dijo Rosanía, el analista de seguridad del CESDAI.
Los niveles más altos del narcotráfico en Medio Oriente podrían conducir a la violencia del crimen organizado, según Rosanía.
“El Medio Oriente se ha convertido en una ruta estratégica para los grupos delictivos transnacionales para trasladar las drogas; el que tenga el control de los puntos de distribución, ubicación y compra y venta de drogas, es el que va a tener el poder y el que va a generar violencia”, comentó Rosanía.
Iniciativa de seguridad
En 2013, las autoridades inauguraron el Centro de Información del Delito en Doha, Qatar, para coordinar la lucha contra el narcotráfico en la región del CCG. El centro fue abierto para maximizar la cooperación entre las fuerzas de seguridad de diferentes países, dijeron los funcionarios. Las fuerzas de seguridad comparten información sobre investigaciones y las actividades de los traficantes de drogas, dijeron las autoridades.
El centro ha firmado un acuerdo de cooperación con la Organización Internacional de Policía Criminal (INTERPOL), la Oficina de Enlace de Inteligencia Regional para el Medio Oriente de la Organización Mundial de Aduanas y el Instituto de Formación de la Policía del Ministerio del Interior de Qatar.
Los países del Medio Oriente han estado trabajando con agencias de todo el mundo para combatir las amenazas del narcotráfico. La cooperación internacional es importante en la lucha contra las organizaciones criminales transnacionales, agregó Rosanía.
Las autoridades del Medio Oriente necesitan “entender la forma en que cambian y se adaptan los cárteles de Latinoamérica, cómo enfrentarse a las estructuras criminales dentro de sus capacidades y cómo entrenar a sus fuerzas de seguridad para combatir el narcotráfico”, señaló Rosanía.
“Hay países que han enfrentado conflictos raciales, étnicos o religiosos, pero no a los cárteles de drogas”, concluyó Rosanía.
LAS FARC FORTALECEN SUS LAZOS CON EL LÍDER DEL NARCOTRÁFICO JOAQUÍN ‘EL CHAPO’ GUZMÁN (HOY PRESO PERO NO MUERTO)...
Por Malcolm Alvarez-James
El grupo rebelde comunista colombiano Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) está expandiendo sus lazos criminales con Joaquín “El Chapo” Guzmán, el líder del narcotráfico más buscado en el mundo.
El Chapo, líder del Cartel de Sinaloa, se ha convertido en el cliente y financiero principal para la producción de cocaína de las FARC en Colombia, dijeron las autoridades. Las autoridades sospechan que las FARC controlan al menos la mitad de toda la producción de cocaína en Colombia. El gobierno de EE.UU. ha descrito a El Chapo como el traficante de drogas más poderoso del mundo.
Decomiso de cocaína
En agosto de 2013, las fuerzas de seguridad colombianas que operan en Choco, provincia cercana a la frontera entre Colombia y Panamá, decomisaron 1,4 toneladas de cocaína a los rebeldes de las FARC. Las fuerzas de seguridad sospechan que las drogas iban a ser recogidas por el Cartel de Sinaloa.
El envío de cocaína fue organizado por el grupo Frente 57 de las FARC, el cual controla la producción y el transporte de cocaína en la zona rural de bosques y pantanos conocida como el Tapón del Darién. El incremento de los esfuerzos por interceptar el contrabando de drogas marítimo implementados por las fuerzas de seguridad colombianas, y el fortalecimiento en la cooperación con las fuerzas navales de los países vecinos, ha obligado a los traficantes de drogas colombianos a transportar una mayor cantidad de su producto por tierra.
Cuatro meses antes, en marzo de 2013, las fuerzas contra el tráfico de drogas en Colombia decomisaron en la provincia del Cauca cerca de cuatro toneladas de cocaína producida por las FARC, parte de la cual estaba destinada para el Cartel de Sinaloa, según indicaron autoridades de seguridad colombianas.
Cooperación mejorada
Después de la reunión binacional del 25 de noviembre en la ciudad colombiana de Ipiales, el presidente colombiano Juan Manuel Santos y su homólogo ecuatoriano Rafael Correa anunciaron que los dos países han firmado acuerdos para fortalecen la cooperación entre los dos países en la lucha contra el crimen organizado transnacional.
Las FARC y el Cartel de Sinaloa
Por años, el Cartel de Sinaloa y otras organizaciones transnacionales, como Los Zetas, han comprado cocaína producida en Colombia.
A las autoridades les preocupa que el Cartel de Sinaloa esté tomando un papel directo en la producción y exportación de cocaína colombiana. En octubre de 2013, Univisión emitió una entrevista con un supuesto ex comandante de las FARC, quien indicó que los operativos del Cartel de Sinaloa eran conocidos como “Los Sombrerones”.
Los Sombrerones estaban involucrados en forma muy cercana con las operaciones de producción de drogas de las FARC en Colombia, comentó la fuente. Las FARC consideraban a los operarios del Cartel de Sinaloa como los socios ideales en los negocios debido a que pagan bien y a tiempo.
“Franquicias” de tráfico de drogas
En marzo de 2013, el diario colombiano El Tiempo reportó que los operarios del Cartel de Sinaloa estaban comprando “franquicias” de tráfico de drogas a los comandantes de mediano nivel de las FARC. Las negociaciones de paz en curso entre las FARC y el gobierno colombiano, y la disminución del poder del grupo rebelde después de cinco décadas de lucha, han llevado a algunos comandantes de las FARC a empezar a distanciarse de las operaciones de tráfico de drogas ilegales con los operarios del Cartel de Sinaloa.
FARC, que ha sido designada como una organización terrorista por el gobierno colombiano, la Unión Europea, los Estados Unidos y otros gobiernos, se formó en los años de 1960 y se cree que cuenta con cerca de 9.000 miembros, casi la mitad de su fuerza anterior. El grupo rebelde ha financiado sus operaciones habitualmente mediante el tráfico de drogas, secuestros por rescate y la extracción ilegal de oro.
Las campañas antidrogas de las fuerzas de seguridad colombianas han reducido considerablemente el abasto y la calidad de la cocaína colombiana. Algunos analistas de seguridad creen que el Cartel de Sinaloa tiene la intención de consolidar y modernizar la producción de cocaína en Colombia para incrementar la calidad y confiabilidad. El Cartel de Sinaloa supuestamente está operando los laboratorios que procesan cocaína ubicados cerca de la frontera con Ecuador, en los departamentos de Antioquia, Córdoba y en Norte de Santander, cerca de la frontera con Venezuela.
El Chapo expande sus operaciones en Colombia
El hecho de que El Chapo esté expandiendo sus operaciones en Colombia no es una sorpresa, señaló Eruviel Tirado Cervantes, una analista de seguridad de la Universidad Iberoamericana (UIA) en la Ciudad de México.
“La alianza entre el Cartel de Sinaloa y las FARC es de un carácter estrictamente económico”, precisó Tirado Cervantes. “Mientras estos grupos operen desde la perspectiva de maximizar sus utilidades y reducir sus riesgos, las alianzas estratégicas entre el Cartel de Sinaloa y las FARC serán factibles”.
Mientras El Chapo y las FARC están colaborando para participar en el tráfico de drogas, los gobiernos de Colombia, Ecuador, Perú, México y otros países en la región están fortaleciendo la cooperación en el combate del crimen organizado, dijo el analista de seguridad.
“Las naciones de América Latina están preparadas para estar a la altura de este reto y lograr contener a los grupos del crimen organizado y al tráfico de drogas”, afirmó Tirado Cervantes.
Una amenaza transnacional
El Cartel de Sinaloa cuenta ya con extensas conexiones de contrabando de drogas y lavado de dinero con grupos del crimen organizado en Australia, Europa, África, Sudamérica y los Estados Unidos.
Por ejemplo, en febrero de 2013, la Comisión del Crimen de Chicago nombró a El Chapo como “enemigo público número uno”. El Cartel de Sinaloa tiene profundas conexiones con el comercio de drogas en esa ciudad. El título de “enemigo público número uno” fue otorgado por primera vez al capo de la mafia estadounidense Al “Cara cortada” Capone, quien operó en Chicago en las décadas de los años 20 y 30.
Se cree que El Chapo tiene 58 años. Ha sido descrito por la revista Forbes como una “de las personas más poderosas” del mundo, y se cree que es el 10° hombre más rico en México, con un patrimonio neto de $1.000 millones de dólares.
"EL NARCOTRAFICO PAGA CON LA MUERTE"...COLOMBIA: El Cártel de Sinaloa y las FARC trafican drogas al Medio Oriente...Un pequeño informe de lo que tenes que saber sobre el mundo de los SEÑORES DE LA MUERTE", porque a cada instante nos estan haciendo creer desde el giobierno Kirchnerista de la viuda Cristina Fernandez , que Colombia es "un paraiso terrenal y que ya hace rato supero el tema del narcotrafico"...Una mentira mas de un gobierno que te dice ademas que la "inseguridad es una sensación"...(titulado, comentado y publicado por Miguel)...
El grupo rebelde comunista colombiano Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) está expandiendo sus lazos criminales con Joaquín “El Chapo” Guzmán, el líder del narcotráfico más buscado en el mundo.
El Chapo, líder del Cartel de Sinaloa, se ha convertido en el cliente y financiero principal para la producción de cocaína de las FARC en Colombia, dijeron las autoridades. Las autoridades sospechan que las FARC controlan al menos la mitad de toda la producción de cocaína en Colombia. El gobierno de EE.UU. ha descrito a El Chapo como el traficante de drogas más poderoso del mundo.
Decomiso de cocaína
En agosto de 2013, las fuerzas de seguridad colombianas que operan en Choco, provincia cercana a la frontera entre Colombia y Panamá, decomisaron 1,4 toneladas de cocaína a los rebeldes de las FARC. Las fuerzas de seguridad sospechan que las drogas iban a ser recogidas por el Cartel de Sinaloa.
El envío de cocaína fue organizado por el grupo Frente 57 de las FARC, el cual controla la producción y el transporte de cocaína en la zona rural de bosques y pantanos conocida como el Tapón del Darién. El incremento de los esfuerzos por interceptar el contrabando de drogas marítimo implementados por las fuerzas de seguridad colombianas, y el fortalecimiento en la cooperación con las fuerzas navales de los países vecinos, ha obligado a los traficantes de drogas colombianos a transportar una mayor cantidad de su producto por tierra.
Cuatro meses antes, en marzo de 2013, las fuerzas contra el tráfico de drogas en Colombia decomisaron en la provincia del Cauca cerca de cuatro toneladas de cocaína producida por las FARC, parte de la cual estaba destinada para el Cartel de Sinaloa, según indicaron autoridades de seguridad colombianas.
Cooperación mejorada
Después de la reunión binacional del 25 de noviembre en la ciudad colombiana de Ipiales, el presidente colombiano Juan Manuel Santos y su homólogo ecuatoriano Rafael Correa anunciaron que los dos países han firmado acuerdos para fortalecen la cooperación entre los dos países en la lucha contra el crimen organizado transnacional.
Las FARC y el Cartel de Sinaloa
Por años, el Cartel de Sinaloa y otras organizaciones transnacionales, como Los Zetas, han comprado cocaína producida en Colombia.
A las autoridades les preocupa que el Cartel de Sinaloa esté tomando un papel directo en la producción y exportación de cocaína colombiana. En octubre de 2013, Univisión emitió una entrevista con un supuesto ex comandante de las FARC, quien indicó que los operativos del Cartel de Sinaloa eran conocidos como “Los Sombrerones”.
Los Sombrerones estaban involucrados en forma muy cercana con las operaciones de producción de drogas de las FARC en Colombia, comentó la fuente. Las FARC consideraban a los operarios del Cartel de Sinaloa como los socios ideales en los negocios debido a que pagan bien y a tiempo.
“Franquicias” de tráfico de drogas
En marzo de 2013, el diario colombiano El Tiempo reportó que los operarios del Cartel de Sinaloa estaban comprando “franquicias” de tráfico de drogas a los comandantes de mediano nivel de las FARC. Las negociaciones de paz en curso entre las FARC y el gobierno colombiano, y la disminución del poder del grupo rebelde después de cinco décadas de lucha, han llevado a algunos comandantes de las FARC a empezar a distanciarse de las operaciones de tráfico de drogas ilegales con los operarios del Cartel de Sinaloa.
FARC, que ha sido designada como una organización terrorista por el gobierno colombiano, la Unión Europea, los Estados Unidos y otros gobiernos, se formó en los años de 1960 y se cree que cuenta con cerca de 9.000 miembros, casi la mitad de su fuerza anterior. El grupo rebelde ha financiado sus operaciones habitualmente mediante el tráfico de drogas, secuestros por rescate y la extracción ilegal de oro.
Las campañas antidrogas de las fuerzas de seguridad colombianas han reducido considerablemente el abasto y la calidad de la cocaína colombiana. Algunos analistas de seguridad creen que el Cartel de Sinaloa tiene la intención de consolidar y modernizar la producción de cocaína en Colombia para incrementar la calidad y confiabilidad. El Cartel de Sinaloa supuestamente está operando los laboratorios que procesan cocaína ubicados cerca de la frontera con Ecuador, en los departamentos de Antioquia, Córdoba y en Norte de Santander, cerca de la frontera con Venezuela.
El Chapo expande sus operaciones en Colombia
El hecho de que El Chapo esté expandiendo sus operaciones en Colombia no es una sorpresa, señaló Eruviel Tirado Cervantes, una analista de seguridad de la Universidad Iberoamericana (UIA) en la Ciudad de México.
“La alianza entre el Cartel de Sinaloa y las FARC es de un carácter estrictamente económico”, precisó Tirado Cervantes. “Mientras estos grupos operen desde la perspectiva de maximizar sus utilidades y reducir sus riesgos, las alianzas estratégicas entre el Cartel de Sinaloa y las FARC serán factibles”.
Mientras El Chapo y las FARC están colaborando para participar en el tráfico de drogas, los gobiernos de Colombia, Ecuador, Perú, México y otros países en la región están fortaleciendo la cooperación en el combate del crimen organizado, dijo el analista de seguridad.
“Las naciones de América Latina están preparadas para estar a la altura de este reto y lograr contener a los grupos del crimen organizado y al tráfico de drogas”, afirmó Tirado Cervantes.
Una amenaza transnacional
El Cartel de Sinaloa cuenta ya con extensas conexiones de contrabando de drogas y lavado de dinero con grupos del crimen organizado en Australia, Europa, África, Sudamérica y los Estados Unidos.
Por ejemplo, en febrero de 2013, la Comisión del Crimen de Chicago nombró a El Chapo como “enemigo público número uno”. El Cartel de Sinaloa tiene profundas conexiones con el comercio de drogas en esa ciudad. El título de “enemigo público número uno” fue otorgado por primera vez al capo de la mafia estadounidense Al “Cara cortada” Capone, quien operó en Chicago en las décadas de los años 20 y 30.
Se cree que El Chapo tiene 58 años. Ha sido descrito por la revista Forbes como una “de las personas más poderosas” del mundo, y se cree que es el 10° hombre más rico en México, con un patrimonio neto de $1.000 millones de dólares.
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